El centrocampista alemán Mesut Özil ha cerrado efectivamente la puerta al fútbol internacional, camiseta de alemania citando las críticas de los medios y del presidente de la federación alemana de fútbol que él considera racistas. Los locales parecieron quedar cada vez más envueltos en el esquema planteado por el equipo ecuatoriano y se mostraron más temerosos a la hora de mover el balón y presionar en el comienzo del partido.